La Fundación Erika nace de una historia de superación, esperanza y un sueño hecho realidad. Erika Becerra, nuestra fundadora y presidente, transformó su propia experiencia con la violencia familiar en una fuerza motriz para el cambio. A través de su visión, lo que comenzó como un pequeño grupo de superación personal en su hogar, ha evolucionado hasta convertirse en un faro de apoyo para más de 700 beneficiarios entre mujeres, niños y jóvenes. Hoy, la Fundación Erika no solo representa un refugio para aquellos en busca de esperanza, sino también un espacio donde es posible aprender, crecer y transformar vidas.
Origen
Todo comenzó en agosto de 2014, cuando Erika, con el apoyo de su hijo Javier y otras personas que se unieron a la causa, inició un grupo de superación personal. El interés y la participación creciente llevaron a Erika a rentar un espacio más grande, marcando el nacimiento oficial de nuestro proyecto el 09 de septiembre de 2014. A pesar de los desafíos económicos, el deseo de superación de las mujeres nunca flaqueó, y la organización continuó creciendo, ofreciendo una variedad de clases y talleres que han sido fundamentales para el desarrollo personal y profesional de nuestros beneficiarios.
Misión
Ofrecer atención integral a las personas más vulnerables, especialmente mujeres y familias afectadas por la violencia, proveyendo apoyo psicológico, asesoría legal y asistencia médica. Nos comprometemos a empoderar a nuestras beneficiarias mediante la educación, el desarrollo de habilidades laborales y personales, y la promoción del bienestar emocional a través de cursos, talleres y actividades culturales. Buscamos fomentar una comunidad de apoyo que valore la solidaridad, el crecimiento personal y la igualdad de oportunidades, trabajando para construir un futuro donde todos puedan prosperar en un entorno de respeto y dignidad.
Visión
Consolidarnos como el refugio y guía más destacado para mujeres en situaciones de vulnerabilidad, especialmente aquellas enfrentando violencia. Aspiramos a liderar en el ámbito del desarrollo humano y la capacitación laboral, siendo reconocidos por nuestra excelencia en brindar apoyo psicológico, legal, y educativo. Nos esforzamos por crear un entorno donde cada mujer pueda alcanzar su máximo potencial, empoderada con las herramientas necesarias para forjar un futuro próspero y seguro para ella y su familia. En Fundación Erika, soñamos con un mundo donde la igualdad, la dignidad y las oportunidades estén al alcance de todas, transformando vidas y comunidades para mejor.